¿Es el sufrimiento un castigo de Dios?

En algún punto de nuestra vida todos pasamos por momentos difíciles como una enfermedad, un problema económico fuerte o la muerte de un ser querido.

Quizá algunos encuentren consuelo y fortaleza cuando de forma bien intencionada les dicen "Esa es la voluntad de Dios", y les desean pronta resignación.

Aunque también hay quien razone que "el sufrimiento es causado por Dios". Incluso algunas iglesias tienen como doctrina que en ciertas ocasiones el sufrimiento es un castigo de Dios. Es difícil de aceptar para muchos que Dios pueda llegar a ser tan cruel.

Y ¿Qué opina usted? Es Dios el causante o habrá otras razones. Dejemos que sea la misma Biblia quién nos de la respuesta. En la carta del discípulo Santiago capítulo 1 versículo 13 leemos:

Que nadie diga durante una prueba: “Dios me está probando”. Porque, con cosas malas, nadie puede probar a Dios ni él prueba a nadie.

Según lo que leyó, ¿diría que Dios es el culpable del sufrimiento? ¿Verdad que no? De hecho la Biblia dice que el sufrimiento se debe a varias razones. Por ejemplo en el libro bíblico de Eclesiastés capítulo 8 versículo 9 dice

"El hombre ha dominado al hombre para su propio mal".

Estas palabras resultan tan ciertas pues a menudo, la gente es víctima de la crueldad y el egoísmo de otros seres humanos imperfectos. Asimismo, el libró de Eclesiastés capitulo 9 versículo 11, dice

"a todos les llega un mal momento y algún suceso imprevisto".

En otras palabras, los accidentes se producen sencillamente porque estamos en el lugar y en el momento equivocados, o porque por imprudencias cometemos errores.

Por otra parte, en la primera carta del apóstol Juan en su capítulo 5 versículo 19 leemos que

"El mundo entero está bajo el poder del Maligno".

Con "Maligno" el apóstol Juan se refería al Diablo, un poderoso ser espiritual que no se mantuvo fiel a la verdad. Otros ángeles se le unieron y se convirtieron en "demonios". Desde entonces han ejercido una poderosa y cruel influencia en el mundo, pero ahora su influencia es más evidente que nunca. Solo un ser malvado y sin corazón haría sufrir a personas inocentes.

Estos son solo algunos textos que muestran que el sufrimiento no es causado por Dios ni es instrumento de castigo. Por el contrario, la Biblia muestra que la personalidad de Dios lo mueve a ser bondadoso y estar atento a nosotros. Por ello dejamos pendiente la pregunta ¿Cómo se siente Dios al vernos sufrir?